Día de la Mujer: ¿qué es el efecto “Matilda”?
Hoy dejaremos las agujas y lanas a un lado para realizar un reconocimiento a una mujer “avanzada” a las mujeres avanzadas a su época: Matilda Joslyn Gage. No sé si les pasa como a mí que conocer sobre la historia me resulta inspirador. Fue así que leyendo sobre el feminismo, me encontré con el trabajo de la historiadora de la ciencia Margaret W. Rossiter y el fenómeno que bautizó “efecto Matilda”. Me pareció interesante rescatar esta visión y compartirla con ustedes, ya que en gran parte somos mujeres las que conformamos este grupo.
¿Quién fue Matilda Joslyn Gage?
Fue una sufragista y abolicionista de finales del siglo XIX en Estados Unidos que luchó por los derechos de las mujeres y de las minorías. Durante toda su carrera intentó reivindicar el papel protagonista de ciertas figuras femeninas olvidadas.
Nacida en marzo de 1826 cerca de Nueva York, Matilda tuvo acceso a una buena educación. En 1845 se casó con Henry H. Gage, con quien tuvo cuatro hijos. Como había ocurrido con la casa familiar de su infancia, su nueva residencia también se convirtió en un punto de referencia de la “Underground Railroad”, el apodo con el que era conocida la red clandestina de apoyo a los esclavos fugitivos.
A pesar de no ser tan conocida como sus colegas, Matilda fundó, junto con Susan B. Anthony y Elizabeth Cady Stanton, la Asociación Nacional pro Sufragio de la Mujer (NWSA, por sus siglas en inglés). Cuando el movimiento se desvió hacia una línea más conservadora, y de la cual Matilda no coincidía, fundó en 1890 la Unión Liberal Nacional de Mujeres (WNLU). En ella se reflejaba el pensamiento de su creadora quien, a pesar de ser profundamente religiosa, consideraba que la iglesia cristiana era un potente altavoz de la expansión del supremacismo masculino.
También, durante muchos años trabajó para diferentes publicaciones, pero fue en su etapa al frente de El Ciudadano Nacional donde pudo escribir con mayor libertad. Allí ponía el foco sobre mujeres históricas de gran importancia, pero que habían sido olvidadas. “Aunque la educación científica a la mujer le fue negada enormemente, algunos de los inventos más importantes del mundo se deben a ella”, escribió enumerando varios ejemplos.
El legado de Matilda
Tomando su ejemplo, en 1993 la historiadora estadounidense de la ciencia Margaret W. Rossiter usó en su honor el nombre para bautizar algo que ella dio en llamar el “efecto Matilda”. La investigadora había observado cómo a lo largo de la historia las mujeres recibían sistemáticamente menos reconocimiento por sus trabajos científicos de lo que objetivamente merecían. En su investigación, observó que este patrón de invisibilidad femenina se repetía una y otra vez en la ciencia.
En resumen, el efecto Matilda es el nombre que recibe una discriminación que han sufrido muchas científicas. A lo largo de la historia, a muchas mujeres investigadoras se les negaron sus aportaciones y la autoría de sus descubrimientos fue dada a sus compañeros de investigación. Una injusticia que ha impedido que la historia las recuerde como se merecen, y que no aparezcan por ejemplo en los libros de texto escolares, tan solo por citar un ejemplo.
“No más Matildas”
La Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas de España (AMIT) impulsa desde 2021 la Campaña “No más Matildas” con el objetivo de concientizar a la sociedad sobre la poca visibilidad que tienen las mujeres en el campo científico. Además, pretenden recuperar los nombres de las mujeres de la ciencia que fueron silenciados, olvidados y borrados, de forma tal que queden impresos en los libros escolares, y sirvan de referencia para despertar la vocación científica en las niñas.
La desigualdad de género no es una novedad. Si bien han ocurrido avances, persisten muchas inequidades y prejuicios que siguen vigentes en la sociedad.
A nivel global, las mujeres son menos de un tercio de los investigadores y solo el 3% de Nobel en Ciencia (medicina, física, química y economía) han sido otorgados a mujeres, señala la Organización de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres en un estudio de septiembre de 2020.
Con la pandemia por covid-19 la situación de desigualdad en las ciencias se agravó. En palabras de la Directora Carmen Fenoll Comes de AMIT: “El 40% de las científicas tuvo que dedicar bastante tiempo a los cuidados de los hijos y a veces al de sus padres, contra solo el 15% de los hombres”, citando fuentes del Ministerio de Ciencia e Innovación de España.
¿Qué podemos hacer?
Es lo que me pregunto al descubrir esos datos… Hoy conocimos sobre el trabajo de Matilda, de Margaret y las científicas españolas. Me cuesta ser indiferente a una realidad que hoy les conté que pasa en las ciencias duras, pero sabemos que pasa en muchos ámbitos más.
Foto: Freepik
Como mujeres adultas tenemos la capacidad de hacernos valorar y sabemos que las matemáticas no es una cuestión de género (el tejido nos lo muestra día a día con sus cálculos). Entonces, creo que lo que nos toca es motivar a las niñas. Contarles de lo que son capaces, que ellas también pueden explorar el mundo que los rodea según su edad, preguntarles qué sienten pero también qué piensan, permitirles el juego libre que incluya destreza física u oficios. En definitiva, démosles la posibilidad de desarrollarse integralmente.
Fuentes utilizadas: @nomorematildas y BBC
María Alcira Prack
Muy bueno el artículo. Permitame discrepar. Cuando dice” a pesar de ser profundamente religiosa consideraba que la Iglesia Cristiana era una potente altavoz de la expansión del supremacismo masculino”. En primer término ella era Teosófica. (Estudio comparativo de Ciencia,religión y filosofía)Y en segundo lugar la Iglesia proclama desde hace más de 2000 años a La Gran mujer, Maria madre de Jesús.
De tal modo
hay grandes mujeres en la historia Teresa de Calcuta, Edith Stein, Florence Nightingale, etc. Es cierto que muchas lo fueron silenciosamente. Y nos toca a nosotras reivindicarlas como dice Lucila. Pero este reclamo de derechos no debe ser una lucha contra el hombre como veo actualmente. Sino un reclamo constante y haciéndonos valer pacíficamente.
Por eso me gusta más el primer título”efecto Matilda” y no ” no más Matilda” que parece hasta despreciarla.
Espero se entienda mi punto de vista de que es la misma mujer con su enseñanza trasmisión a los demás de todos sus conocimientos y valores hará que surja una humanidad mejor de hombres y mujeres.
Isabel Larghero
Hace poco que intento aprender a tejer y por suerte encontre esta forma de tejer Bien y Facil.
Sobretodo me gusta que quede bien.
Por ahora voy lento pues cualquier tarea para que quede bien hay que aprender mucho.
Pero hoy me encuentro con esta historia, que no conocia y de una mujer como hay muchas pero que muchas como Matilde son olvidadas.
Me gusto mucho que usaraas el dia de Las Mujeres para relatar tu historia.
Muchas gracias y que como una gran Maestra sigas aportando historias removedoras
abrazo
Elsa Lundberg
En Tejer con Lucila he encontrado esta marravillosa pagina para a hacer prendas con perfeccion,, calidad, buen gusto ,con una maravillosa persona que ha sabido enfocar sus conocimientos , experiencia , creatividad, con videos de una manera clarisima , sencilla, que realmente da gusto escucharte y hace que nuestros deseos de aprender sean mayores y demos mas tiempo del que se pensaba para tejer .
El que compartas tu parte intelectual es un PLUS,
Muchisimas gracias por tus grandes ideas , ensenanza y compartimiento.
Carolina Tocornal
Que bella historia . Mil gracias Lucila por tener en cuenta este gran día especialmente en estos tiempos , en que pareciera a ratos que estuviésemos más cerca de llegar a puerto.
Mil gracias , hermoso: ya era hora .
Lucila - Tejer con Lucila
Sí, es una larga lucha. ¡Pero no bajemos los brazos! Cariños
Susana
Una Maestra de verdad! Gracias Lucila por compartirlo, las mujeres fuimos y seremos las arquitectas de la vida. Un abrazo
Lucila - Tejer con Lucila
Gracias por su mensaje Susana. Otro abrazo
María Cristina Rodríguez
Muchas gracias Lucila por este aporte ,por cierto muy valioso e incentivador
No conocía ni la historia ni a quienes impulsaron ese movimiento
Es hora de que las mujeres mayores miremos alrededor para ver a nuestr@s jóvenes carentes de conocimientos de la historia que nos forjó valores y podamos aportar un pequeñísimo.grano de arena trasmitiendo nuestros saberes y no solo a tejer,coser bordar,o cocinar la historia de quienes han quedado en el olvido y lo más fundamental enseñar a nuestros niñ@s,adolescentes,jóvenes la portancia de las matemáticas entre otras cosas comomel respecto y la humanización del individuo
Lucila - Tejer con Lucila
Me alegra que le haya aportado un nuevo conocimiento. Lindos valores son los que ha descrito. Cariños
Olga Blanquel
Gracias
Por compartir este gran espacio de la historia en dónde grandes mujeres han quedado apartadas de la historia escrita, pero que no han sido olvidadas en historia cotidiana y que además a personas como Usted se dan a la tarea de buscar y compartir lo logros de estás grandes mujeres
Lucila - Tejer con Lucila
Gracias Olga por apreciarlo. Cariños
Cristina Rossini
Muy interesante!!!el mundo de las mujeres no deja se sorprender!!
El apellido de la in vestigadora es el mismo que mi abuela Anastacia Rositer
Lucila - Tejer con Lucila
Mire qué bien… Algo más para contar a la familia. Cariños
Mónica
Hola Lucía,un placer poder aprender, siempre. En parte de su carrera también lo sufrió Marie Curie…y ni hablar de la primera esposa de Einstein, cuyo nombre ni siquiera pasó a la historia. Espero con fe que se apoye a las niñas científicas.
Lucila - Tejer con Lucila
Sí, es cierto lo que cuenta. Justamente el movimiento No más Matildas hace mención a Marie Curie y a Einstein… Yo creo a futuro todo será mejor para las mujeres.
Ángeles Carrasco
Un artículo interesantísimo que me ha permitido conocer a esta gran MUJER de la que no tenía conocimiento, por tanto gracias por enseñarnos además de a tejer mejor, a conocer historias como esta que me ha dado un enfoque diferente de este día de la Mujer, es muy importante la pregunta que planteas, ¿Qué puedo hacer yo para cambiar esta realidad? y a recordarnos que somos capaces de hacer todo lo que nos proponemos y que tenemos el deber de enseñar en nuestros ambientes, desde la realidad que cada una vivimos la importancia de educar en igualdad y poner en valor en esta sociedad que nuestras capacidades y nuestros trabajos deben tener el mismo valor y reconocimiento que el que desarrollan los hombres, que ya de entrada lo tienen todo ganado y nosotras lo tenemos que pelear a diario. Gracias Lucila.
Ángeles
Lucila - Tejer con Lucila
Me alegra poder compartir esta información que a mi modo de ver es valiosa y como tal, merece ser conocida por más personas. Gracias por ser parte de este espacio. Un cariños